Pasión por la buena restauración, cansados de leer lo mismo de siempre, un punto de vista del propio usuario de restaurantes y compradores de vinos, y demás bebidas. #BeberOCatar, #ApertasDoViño
Puedo ponerme a escribir y a contaros historias, mandangas y mucho más temas sobre vino y historias y yo que sé.
Pero este blog es otra concepto, reconozco que gracias a Rafa Tobar le hemos cogido el rollo a escribir de nuevo, a seguir contando estas cosas que sentimos cuando nos enfrentamos a una botella de vino.
Pero ojo, hace años que dejamos de dar puntos, quienes somos nosotros, y menos aún quien es nadie para destruir o empoderar el trabajo de esta gente vitivinicultor que se deja la vida y el dinero para sacar adelante un líquido y viene un gallo y le da 89 en vez de 91, home no me jodas, nosotros no estamos ahí, y es por ello que ni nos hacemos a la idea de vivir de este mundo, por eso los larpeiros no buscan vivir de esto, pero si pueden hablar bien de un amigo no dudaremos de hacerlo.
Recuerdo cuando conocí a Xurxo, un salón de vinos en Santander, y joder, me hubiera bebido todo lo que trajo. Me enseñó algo que hoy en día para mi es vital y es ser: HUMILDE.
Cada vez que probaba algo me gustaba, encima me dice que tiene más cosas, y joder me manda muestras de ello, os hemos hablado de… Albamar 2012 mmmmm, Anda, si sobre el Fusco 2013 os comentamos algo aquí , Recuerdo hablar del Fusco Floreano 2012 Aquí, de Albamar Finca o Pereiro 2013 os contamos algo aquí, también del Pepe luis 2012 escribimos aquí, Bucead en el blog y buscad porque cuando un vino es amigo de los larpeiros pues más de una entrada hay.
Estaba haciendo unas rabas, ahora que no podemos salir a la calle, me quedaron bien, joder se ve que mantengo mi toque en la cocina,
y pues como que había que hacer unos muslos de pollo, ya que estamos, por qué no con salsa Teriyaki y me quedó de vicio, mientras cocino me gusta tomar algo de vino de rico y abrí una botella de un vino que compré en Diferente FUSCO 2018
No se por qué compre Fusco, o si lo sé, porque es el vino que hace un amigo, y mi norma es, da de comer a quien te da de comer, y sobre todo ayuda siempre que puedas a un amigo.
y cuando sirvo el vino, lo veo caer y llorar por la copa, como deja su glicerina rozando por la copa, como se nota el trabajo y esfuerzo, porque no es solo meter la nariz, mirar y decir, ole que color que más bonito, ese rojo… pero si ya sabemos todos los tonos que nos da el rojo, y en nariz, mi querido Xurxo, no he estado en tu bodega, algún amigo te he enviado, pero sé cómo huele y respira Galicia, porque es mi 2ª tierra, porque galicia sabe y siente como Fusco, con esa acidez, con esa profundidad, porque Fusco es mas que un Mencía, es un Ribeira Sacra con letras mayúsculas, Por que Fusco es vino galego, donde el Sil muere para dar vida a un mosto que va a hacer que gente que realmente les gusta el vino diga, Galicia en mucho mas que albariño y viño de taza.
Gracias Xurxo por siempre contestar, por siempre estar ahí, porque solo hemos estado juntos media hora, pero joder para mi eres un amigo
Vino Tinto Fusco 2018: Mencía de amigos viva Xurxo
Este vino lo probamos hace ya un tiempo, exactamente hace dos años, son de esas cientos de entradas pendientes de ir escribiendo en el blog, quizá algún año nos pondremos al día, aunque creo que será difícil dado que tenemos la suerte de que bastante a menudo tenemos vamos probando y disfrutando de cosas más actuales.
Pero os contamos nuestra sensación de este vino porque es el día de hoy que repasando los apuntes y fotos he empezado a salivar al recordar, el consejo de comprarlo (Daninland el demente) el momento (En Toledo) la compañía (Josu) y la cena (con su mujer) momentos inolvidables que volveremos a repetir.
Tenemos la suerte de probar la añada en la que esta bodega toma cuerpo en la Ribeira Sacra. Fedellos en galego quiere decir más menos traviesos y O Couto hace referencia a la zona en el Pazo do Couto.
Esta bodega controla 4 hectáreas de viñedo mitad en propiedad y mitad con la colaboración de pequeños viticultores, marcando siempre el respeto del terreno, de la vid.
Este Fedellos do Couto Cortezada está elaborado 100% mencía, con recogida manual, y reposa 12 en barricas viejas de roble frances de diverso tamaño, aromas florales y frutales, largo, agradable, en boca se deja mimar y beber o sea tragar, porque la botella desapareció en un plis-plas. Te entran ganas de abrir más botellas y de buscar más añadas.
Vino Tinto Fedellos Do Couto Cortezada 2013 porque Galicia nos encanta, nos enamora, porque hacen vinos con alma y pasión, nuestra querida terra Galega al poder siempre.
Ya son más de 6 años en el que el día de Noche Buena subimos a Las Piscinas a disfrutar de lo que para nosotros es uno de los templos gastronómicos de Cantabria, y poder saludar a un amigo de verdad, Fonso, al que tengo el placer de conocer desde los 90 ahí es naaaaa.
Y como siempre comemos y más aún bebemos, lo que el nos pone y jamás, jamás ha fallado, por eso es un grande, mejor dicho, es un GRANDE con letras mayúsculas y negrita.
El me conoce bastante bien, y alguno de vosotros también, y sabe que mi predilección por Galicia es muy grande, así que esta nochebuena del 2019 nos puso el Vino Tinto Antonio do Nicho 2018, y vaya acierto.
Elaborado en Chantada (por cierto allí hay unas manzanas espectaculares y hacen una sidra rica rica) En una bodega centenaria, que ellos arreglaron para dar lugar a este buen vino tinto. Cómo nos gusta su frase de la web !!! Antonio Do nicho: Para camiñar firme, tes que saber de onde vés. O pasado é moi importante para nós.
Con una elaboración de 720 botellas llega a nosotros la número 94. Las uvas vienen de nuestra querida Ribeira Sacra, mencía y garnacha para reposar durante tres meses en botella y darnos un vinazo, noble, alegre, divertido, sano, entusiasmante, frutal, largo, complejo, natural, galego, terráqueo, con tipicidad, que al final como dicen los sumilleres, el vino debe tener acidez y decir en nariz de donde es, de la terra, del terruño porque lo que manda es la vid. Como me ha gustado este Viño.
Antonio do Nicho 2018, si por mi fuera las 720 botellas eran mías, a ver si conseguís beber alguna de ellas. Espero podáis disfrutar de alguna de esas botellas, subid a las Piscinas de Villacarriedo y pedídselas a Fonso.
No dejaremos de decir que los tintos de nuestra querida Terra Galega son algo maravilloso, ya no recuerdo cuantos años llevamos diciéndolo, muchos más de la vida que tiene este blog que en breve estará de cumpleaños. Pero nos seguimos reafirmando en ello, y más con gente como la bodega Regina Viarum que ya hace años nos mandaron unas muestras que nos gustaron un montón.
Fue en 2001 cuando la familia Araujo tomó las riendas de este gran proyecto, partiendo de una frase con la que ellos presentan su web que dice así: ¿Quieres hacer el mejor vino de la Ribera Sacra? y llevan un buen camino para lograrlo.
Dentro de esa maravillosa viticultura heróica con 45º de inclinación, donde parece que vas a caer a rolos por todo el viñedo y desembocar en el Sil. Luchando por lograr conseguir ese maravilloso fruto que nos da la vid para deleite de los tragaldabas como nosotros.
Este Expresión es 100% mencía con 10 meses en barricas de roble, nos gusta ese rojo, intenso, con lágrima mágica que baja por el cristal, notas balsámicas que llenan la nariz sutilmente. Es genial como los 14.5º no se notan, giramos el vino para ayudar al oxígeno a que haga su función y lo metemos en la boca para notar como entra suave y rodea la lengua y nos toque esa acidez equilibrada y dé paso a una retronasal elegante.
Un buen vino para seguir de cerca, y además con nueva etiqueta, dado que los larpeiros ya publicamos la añada 2009 aquí. ¿Cómo pasa el tiempo verdad?
Esperamos, como siempre vuestras opiniones y a ver si vamos arracando la marcha del blog. Un fuerte abrazo y gracias por seguir ahí
Tenía ganas de ir a comer a este restaurante desde hacía bastante tiempo, toda la gente que conozco y había ido estaban encantados, así que al final me animé. También tenía ganas de saludar al querido amigo Koldo, pero por mala suerte ese día no trabajaba, así que tendré que volver en otra ocasión y poder disfrutar de su buen hacer y su gran profesionalidad.
Pasamos al comedor que se encontraba bastante animado y muy amablemente nos dirigen a nuestra mesa y nos preparamos a disfrutar.
Somos dos a comer y pedimos un entrante para compartir, un segundo plato para cada uno y dos postres:
Nos sirven de aperitivo Crema de hongos con bocarte marinado: Crema bastante rica, con una base de patata sabrosa y al lado un buen filete de bocarte que aquí llamamos boquerón a esta elaboración. Ya sabéis que en Cantabria se distingue entre bocarte, anchoa y boqueron. Empezamos con buen pie.
El entrante fue Ceviche de Corvina y vinagreta de jengibre y cebolleta, sabroso y bien marinado, contundente, quizá un pelín alto de cítrico, por lo demás un plato agradable cada vez más introducido, buena corvina, es una buena idea para darle salida a este pescado que no está mal del todo.
Uno de los platos fue Solomillo de buey con crema de patata hongos y foie, ración más que generosa de carne y guarnición, la salsa sabrosa, buena base de caldo oscuro, y las verduras bien cocidas, para mi gusto yo habría puesto la salsa en un costado más que bañando a la carne, pero eso es un gusto particular.
El otro plato hamburguesa de pierna de cordero, ajos asados y patata, una gran hamburguesa, exquisita de sabor, muy buena de verdad, pero sin patatas y con la misma guarnición que el solomillo como bien podéis ver en las fotos. Fallo de imaginación? De preparación? No sé cual fue pero fue un fallo simpático.
Un postre fue Brownie de chocolate y nueves con helado de vanilla, estaba rico, apetecible.
El otro postre Raviolis de piña y queso cremoso con helado de coco, también muy agradable, la pena la decoración de los platos con los cachitos de plátano y la hoja de menta, pero bueno eso es gusto particular mío.
Para beber pedimos un vino que no estaba en la carta y que vi al entrar un Tinto Tolo Do Xisto 2014 de la Ribeira Sacra, 100% mencía. Loco por la pizarra es la creación de la enóloga gallega Andrea Obenza. Vino alegre, divertido de fácil beber, con paso de boca suave, entretenido, con mucha fruta. Le volveré a probar porque me gustó bastante.
Pagamos 95€, al final, para nosotros, la RCP no es muy buena, he de decir que el servicio nos gustó mucho, grandes camareros, atentos, con la sonrisa siempre en la cara, eso que cuesta tantísimo de encontrar hoy en día. Pero la cocina nos dejó un poco descontentos, los platos para costar el solomillo 24€ y la hamburguesa 19€ creo que no están a la altura. Pero claro esa es nuestra impresión. Nos vamos con la sensación de un local que tiene un muy buena sala, pero le falta algo en la cocina.
El pasado 20 Mayo os hemos contado la gran experiencia que vivimos una noche con los vinos de Atrium Vitis, os hablamos de los blancos (aquí), y hoy os traemos los tintos. Deciros que tuvimos un pequeño problema, y un problema aún mayor. Uno de los que estaba en la mesa dice:” Déjame ya sirvo yo esta de tinto” y ATPC la botella explotó en el suelo. El otro problemilla fue que estábamos tan contentos que se nos fue la pinza en el tema de las fotos de la comida. Estos Vinos consiguieron hacernos llegar al placer, al punto de flipar, podíamos decir que estábamos ante algo tan bueno que nosotros mismos casi ni nos lo creíamos. Nos embargamos de emoción y para qué seguir haciendo las fotos de los platos. Eso o que quizá subliminalmente, esperamos que Ana, de la bodega, se enrolle venga a casa con la colección completa y repitamos con ella el maridaje. Una opción que nosotros estamos encantados de llevar a cabo sin problemas.
Pues ale como dice El Chojin, “Al lío”
Tinto Quinta Toucedo Mencía
Un mencía joven, fresco, pero con sabor, potencia. Sabe a mencía, huele a mencía, sin tapujos, como debe ser, directo, noble, alegre, un buen vino, un gran vino, para divertirte con el. Mira que nos gusta esta uva tratada con cariño y sólo acero inoxidable.
Su evolución nos parece maravillosa, la botella le doma esa acidez y se redondea perfectamente con el tiempo para dejarnos el paladar alegre y fiestero.
sin lugar a dudas un buen compañero de viaje. Para esta ocasión Minniky preparó una empanada Gallega de atún. Os dejamos una foto de la receta que pusimos hace ya un tiempo, y su enlace. Mi empanada Gallega.
Tinto Quinta Toucedo Barrica
Pasamos a disfrutar de esta uva pero con una elaboración de 10 meses de crianza en barricas de roble americano, y …. pues lo dicho, el niño dejó caer la botella al suelo. Ains. pero en fin, como sabemos que algún siglo de estos lo volveremos a probar, tendremos disculpas para hacer la entrada oportuna que se merece.
Para este vino Minniky hizo unos pinchos de panceta que estaban ricos no, lo siguiente, maravillosos, espectaculares.
Tinto Quinta Toucedo, en breve será llamado Silius.
Mira que lo pasamos genial, pero es que es recordar este vino, y empezar a salivar, el mejor de la noche, una sorpresa sin igual. Un vino para tomarlo de rodillas de lo bueno que está. Sin D.O. dado que esta última les decía que no cumplían los parámetros de acidez y ellos se negaron a corregirla. A ciencia cierta que dieron en el clavo. De verdad me da igual sabor, aromas y todo lo demás, estaba ciertamente de escándalo, de llorar de gusto, de que voy a ver si pillo y consigo más, porque tiene varios años por delante para estar aún mejor. Todo un vino de la Galicia profunda, esa que hace que estemos enamorados de sus tintos, de sus gentes, de Ana y Javier por sudar, por currar y esforzarse en darnos un trocito de nuestra querida Terra Galega. De corazón graciñas.
El vino se llama Silius pues es el nombre en latín del río Sil, pero Ana también nos cuenta: ” Para nosotros es como si fuera el nombre de un soldado romano, valiente…que se atreve a todo, también a estar fuera de la D.O.”
Os dejamos la foto de la que será su etiqueta, esperamos probarlo con ella puesta:
Y por si fuera poco llega Minniky y para este vino se marca un chocolate puro con pimentón picante. Hablamos de las ralladas de Ankabri, Breogán, José Domingo, y alguno que otro que se deja caer por aquí y escribir, pero es que Minniky rompió moldes, porque si el vino estaba para dar brincos de alegría, cuando metías en la boca el chocolate, después de tener todo el paladar impregnado de una mencía con 8 meses de roble francés y un año en botella, hacer que el vino se mueva por toda la boca y entonces aparece lo que todos buscamos, armonía, maridaje, o sea, que el vino con el chocolate entra que te cagas.
Bodegas Atrium Vitis. Ana, Javier. Un placer haber podido probar vuestros vinos, y sin lugar a dudas, habéis conseguido la plaza para Apertas Do Viño por la puerta grande, esperamos veros antes del 2º Domingo de Noviembre.
De vez en cuando tenemos suerte y los Larpeiros podemos juntarnos a liar alguna. Normalmente no solemos escribir sobre el evento, algo que dejamos siempre para nosotros, pero da la casualidad que había varios motivos que nos llevan a hacer esta entrada.
El más importante, es que esta liada la crea Minniky, dado que estuvo con Ana de Bodegas Atrium Vitis en la XII feria de vinos de Cantabria, y aprovechó a traerse unas cuantas muestras para casa. Muestras y el compromiso por parte de la bodega, de que vendrán a Apertas Do Viño el 2º Domingo de Noviembre. Se curró Minniky un día completo. A parte de liarla, encima es que se propuso un maridaje para los vinos. Es por ello que en vez de hacer una entrada para cada vino, os haremos dos, esta de los blancos, y en cuanto tengamos otro rato, haremos la de los tintos. Al fin y al cabo lo bueno que tiene es que son 3 vinos de cada.
Contaros que este proyecto se encuentra en la bajo la D.O. Ribeira Sacra, en Quiroga-Bibei. Son Ana y Javier los artífices de que esto vaya adelante, Javier en el campo y Ana en la promoción y comercialización del producto final. Ambos ayudados de un querido conocido nuestro que es el enólogo Luis Buitrón (creador entre otros de Regueiral y Lar de Ricobao). Es curioso el mundo del vino, no nos deja de alucinar la forma que tiene de poner en contacto a personas. Fue por el cara-libro que Ana se puso en contacto con nosotros para saber cómo poder estar en Apertas Do Viño (al final va a coger fama esto ya veréis) que cuales eran los requisitos. Y la verdad que los requisitos son que las bodegas sean amigas nuestras o vengan avaladas por un amigo y que el vino nos guste. Así que Ana, aprovechando el salón de vinos, se presentó en Santander y aquí estamos contándoos nuestra experiencia. Lo que no hay duda es que detrás de una botella, tiene que haber gente que sepa trabajar lo que tiene, aunque en la Ribeira Sacra y su vitucultura heróica y demás ayudan al que el producto sea de una calidad considerable, si las personas no se involucran y no saben lo que tiene entre manos, va a ser difícil de beber ese líquido. Ana nos ganó, nos transmitió mucho sentimiento, y aguantó como campeona hasta el final. y hoy nos toca a nosotros intentar estar a la altura.
Pacio de Donas Albariño 2013:
Vamos a ello, nos encontramos con la maravillosa, fantástica y también vilipendiada y maltratada uva albariño. En Galicia, pero no en Rías Baixas, sino en Bibei. Elaborado al 100% con esta uva y con un reposo de 3 meses sobre sus lías en barricas de roble francés. Amarillo ligeramente dorado, olor penetrante, hinojo, manzana.
Un vino para tomar con calma, con aire, con reposo, a temperatura de unos 10º. Según se va abriendo se va haciendo más dócil, más amable, más agradable, más… Se acabó la botella. Siempre con lo mismo del magnum, Habrá que hacer el escrito para que nos manden en botellas de litro en vez de 750 ml. Esto es albariño gallego, el albariño que nosotros andamos buscando siempre, menos mal que cada vez encontramos más y podemos ir saciando nuestra necesidad. Con una acidez espectacular que hará que la botella y el tiempo le den una evolución a tener muy en cuenta. Encima Minniky va y compra un queso pasiego de La Jarradilla. esto es maridaje, armonía. ¿Quien coño dijo que para el queso había que poner tinto ?
Pacio de Donas Albariño-Godello Barrica 2013:
90 de albariño y 10 de Godello, forman el coupage de este vino, también con una estancia de 3 meses en barricas de roble francés. Esta gente es alucinante como elaboran. Decir que todos los blancos se podrían haber decantado, porque a la hora de servirlos estaban para tirarse a rolos de gusto. Seguimos con ese amarillo ligeramente dorado que nos encanta, nariz con ligeros toques de vainilla, pero predominando esa manzana que tanto nos atrae.
La godello nos gusta, creo que le dan untuosidad, y ese tiempo de barrica le aporta cuerpo, grasa, vida, envejecimiento, Mucha vida por delante tiene este vino. Es contundente y nos encanta, para qué decir que la botella desapareció aún más rápido que la anterior, en fin. Cada vez se ve más claro que tendremos que ir a la bodega a conseguir más material.
Ensalada de pollo en escabeche es lo que Minniky nos puso para este vino, no habíamos tomado un escabeche mejor en la vida, el punto de vinagre insuperable y la conjunción con el vino nos hizo dar saltos de alegría, es una pasada de bueno, ambos productos juntos.
Pacio de Donas Albariño-Treixadura Barrica 2013:
Llegó el mejor blanco que he tomado en muchísimo tiempo, mira que el Lagar de Pintos nos gustó, pero es que este es la repera. La treixadura está presente en un porcentaje del 10%, y tiene el mismo tiempo de barrica que el anterior. Pero se ve que la treixadura le ha aportado una complejidad exquisita. Paso de colores, aromas, y demás tonterías, está claro que Javier sabe sacarle el jugo a las cepas, fermentarlas y ponerlas en la barrica lo justo. Elaborar como debe ser para poner 750 ml de líquido en una botella y hacernos que nuestro paladar empiece a flipar, a sentir emociones y enamoramientos enológicos que son los que nos hacen estar locos por este mundo.
Aunque los verdaderamente locos son los bodegueros que arriesgan todo a que unos paladares les puedan arruinar su esperanza. Pero ellos no han de temer comentarios negativos, y si alguno hay, que les sienten y les pongan este vino a 12º con 3 horas de oxigenación, que lo caten a ciegas y opinen de verdad. A buen seguro fliparían. Esto está para beber todo lo que el hígado aguante, y para maridarlo una vez más Minniky se sale, se marcó sus “Rita Hayworth”. A sus pies querida Larpeira, porque esto es tener paladar y saber maridar sin lugar a dudas.
Pues bien, hasta aquí la parte de que corresponde a los blancos, como he dicho un poco más arriba, en cuanto podamos hablaremos de los tintos y sus respectivas armonías. Pero de momento quiero dejar claro que en cuanto a blancos Javier y Ana tiene un producto en sus manos a tener muy en cuenta y a seguir cada añada que aparezca en el mercado. Nosotros esperamos que a parte de los dos productos que nos traerán para Apertas Do Viño, alguna botella más nos traigan, que por pedir no quede.
Os dejamos aquí nuestras impresiones de sus vinos Tintos:
Pues sí, nos gustan los tintos gallegos, aunque yo creo que lo mejor sería decir, que nos gustan todos los vinos que estén bien hechos, sean de donde sean, aunque claro está preferimos lo español, sin desmerecer a los grandes vinos que se hacen fuera de nuestras fronteras. Bien sabéis los que nos conocéis nuestra pasión por los blanco de Marcial, en Quinta do Feital. Lo que si tenemos claro es que probamos todo lo que cae en nuestras manos, y que lo que defendemos ante todo son los que se hacen en nuestro país. Somos claros defensores que con el consumo local nos iría a todos y a todas mucho mejor, pero bueno que una vez más se me va la pinza…
Brancellao, uva autóctona de Galicia madura muy bien, su mosto tiene mucho azúcar y buena acidez.
Algueria Brancellao proviene de cepas viejas y escasas, son pisadas y criadas en barricas de roble francés y luego tiene una crianza de unos 12 meses. Es una pasada como Fernando y su mujer Ana han luchado por hacerse un hueco, no ya sólo en Ribeira Sacra que es donde se elaboran los vinos de la Bodega Algueira, sino que a nivel internacional, ya nadie duda de que son unos grandísimos elaboradores de vinos de Terroir, de vinos con pasión. De marcado origen, donde la tierra y el sudor de esa gente, hace que su trabajo nos llega a nosotros para que disfrutemos con cada botella que abrimos.
Color cereza, nariz sutil, elegante, compleja, hierbas aromáticas, frutas, mineralidad de la pizarra, algo de yodo, en boca su paso es amable, sin aristas, en perfecta armonía, le mueves por la boca y es un auténtico placer. Y eso que es un bebé, le queda mucho por delante a este vino, en un par de años estará aún mejor, de hecho dos horas después de abierto estaba flipante. Hemos tenido una gran suerte de probar este vino en su niñez, y lo volveremos a probar a edad adulta, como es natural habrá cambiado, pero seguro que seguirá dejándonos un gran recuerdo.
Algueria Brancellao 2013: Un gran vino, muy bien estructurado, con tiempo por delante. Es muy difícil elaborar así de bien en la Ribeira Sacra con una uva tan complicada y una agricultura tan al límite. Gracias Fernando y Ana por traernos un trocito de Galicia a nuestra casa cada vez que abrimos una botella vuestra.
A veces le meten a uno en buenos berenjenales, vas a tomar una birra y te encuentras cenando con varias personas y encima no conoces a la mitad de ellos. Llega el momento de pedir el vino y te dicen: elige tu que eres el que entiende. Y ahí estás buscando un vino, que te guste, y que creas que le puede gustar a gente de la que no sabes nada, y de paso, ya que estamos, pues intentar probar algo que no conozcamos. El dilema ¿Pido lo que realmente pediría para mi, o mejor algo ajustado de precio aunque interesante? Pues me decanté por la segunda opción, dado que entiendo no todo el mundo está dispuesto a pagar 30€ por una botella de vino en un restaurante, aunque el local sea de los que ajustan bastante los precios. Así que en nuestras manos nos encontramos con este Guímaro joven Mencía del 2014.
Mencía de la D.O. Ribeira Sacra, muy cubierto, con nariz atrayente, mucho chocolate, fruta, nos sorprendió un pequeño toque de lácteo, curioso en verdad. En boca es alegre, de paso muy fácil, de estos vinos que te pispias la botella sin enterarte. Es alegre, para tomar entre amigos y divertirte bastante, y de paso beberte unas cuantas cajas pues es en verdad mencía pura gallega, sin aristas y sin astringencias.
Al final este Guímaro 2014 hizo bien la función, gustó a todos los comensales de la mesa, pero no me gusta elegir vino para gente que no conozco, es bastante difícil la verdad, porque casi todo el mundo dice que no entiende, pero luego mete la nariz y la boca y empiezan con lo de no me gusta, está amargo, o eso tan maravilloso de: “Anda si este vino no rasca…” En fin seguiremos sufriendo en momentos como estos, mientras tanto, nosotros damos las gracias a Pedro M. Rodríguez Pérez por elaborar unos vinos a tener muy en cuenta.
Otro vino del que os hemos hablado es su Guímaro Finca Os Capellinos 2011 y fue una pasada (enlace aquí)
Una vez más estamos encantados de tener amigos como el Demente Daniland, ese al que echamos tanto de menos en la red, pero del que tenemos suerte de compartir, charlar, zampar y tragar a la mínima ocasión que surge. También intercambiamos un montón de cromos, en este caso nos pasó este Guímaro Finca Capeliños 2011, su último descubrimiento de la última vez que le vimos. Hace poco nos lo volvimos a cruzar y nos tiró una botella de champagne realmente espectacular y de la que en breve os contaremos sensaciones y demás.
Elaborado en la D.O. Ribeira Sacra por la bodega familiar Pedro Manuel Rodríguez Pérez. LLeva un 85% de mencía y el resto sousón, garnacha, caiño, parece un secreto difícil de descubrir ese 15% restante, nosotros apostamos por algo de Brancellao, y quizá espeadeiro, eso sí las uvas son de más de 90 años y el vino reposa unos 14 meses en barricas.
Color potente, alto, nariz muy compleja, balsámicos, fruta, vainilla, pimienta, torrefactos. Al estar comiendo y catando, dando vueltas a la copa es Minniky una vez más quien lo identifica a la perfección diciento que sabe, huele y respira a Galicia, ella es la que dice que no es un mencía al uso, pues los que nos conocéis sabéis que ella la mencía no le llama mucho, y este Guímaro Finca Capeliños le llamó muy bien. Es sutil, amable, valiente, con potencia. Acidez y barrica ensambladas, equilibrio, y una vez más pedimos la botella de litro porque esta de 750 no da ni para empezar. Encima acomapañando a un pulpo de los que hace Minniky, es cuando tocamos una vez más el placer de la armonía, del relax, del disfrute.
Guímaro Finca Capeliños 2011, una pasada de vino, de la misma bodega donde sale El Pecado de Raúl Pérez, pero dejad que os diga que nos ha gustado muchísimo más que El Pecado. Un vinazo, para disfrutar y con mucha vida por delante. A partir de mañana intentaremos que esta gente esté en Apertas Do Viño 2015, porque saben hacer el vino que a nosotros nos gusta.
Os hemos hablado también del Guímaro Mencía 2014 aquí.