XIX Salón de los mejores vinos de España Guía Peñín (Parte 2)

Muy buenas a todos y a todas, aquí seguimos para contaros la experiencia del salón Peñin.

Seguimos dando una vuelta y nos encontramos con una bodega que nos gusta bastante y no es otra que Cirsion y allí probamos:

Sela 2015

Cirsión 2016 ( nos gustó aunque si que nos pareció extraño que fuera más joven que el Sela, curioso)

No podíamos estar en Peñín y no visitar a una bodeguera que me encanta, y cuanto más estoy con ella más tengo claro que va a hacer cosas muy importantes en este mundo vitinícola y me refiero a Noelia de Bodegas Callejo, empezamos con:

El Lebrero 2016

Finca Valderoble 2011

Feliz Callejo 2015 (qué bueno por favor)

Recordando viejos tiempos, hace unos 11 años, nos fuimos a probar vinos de aquellos que en su día distribuía nuestro querido, y desgraciadamente desaparecido amigo Gedebe:

Cenit 2012

Nora Da Neve (qué recuerdos de este vino)

Y seguimos dando un paseo y Vimos Artadi, aún recuerdo esa premier a la que acudimos, pero… hacía mucho tiempo que no nos atendían tan mal.

Artadi Valdeginés 2016

Nos fuimos de Artadi a toda velocidad, qué mal recuerdo, y encontramos Raventós I Blanc, para quitar el mal sabor, sólo catamos un vino porque no estaba José, pero volvimos después:

Raventós i Blanc Enoteca 20 años

Y ala, de Cataluña a Galicia, para probar Pazo Señoráns:

Pazo Señorans coleccion y Pazo Señorans Selección añada 2010 (no me gusta eso de que el vino es un bebé, creo que hay que probarlo desde que sale al mercado y luego ver su evolución, sentir como cambia con los años)

Da gusto como se viaja entre vinos, volvimos a Cataluña a la zona de Terra Alta con Bodega Abadal:

Abadal Picapoll 2017 ( me gusta esa uva)

Lafou El Sender 2016 (nos sorprendió)

Yo no podía estar en Peñín y no buscar la Bodega Alto Moncayo, así que en cuanto la vi allá que me lancé

Veratón 2015

Alto Moncayo 2015

Aquilón 2015 (sublime, sin palabras, lágrimas de pasión)

Creo que fue allá por el 2006-2005 la memoria se me pierde, cuando conocí a Dani Landi. Y aunque ya se que no está en Jimenez Landi fui a probar esos vinos para recordar viejos tiempos (nos encantaron):

Jimenez Landi Sotorrondero

Jimenez Landi Piélago

Tengo la suerte de conocer la historia de Jean Leon hace muchos años, de hecho yo vendí Aquel Mitico del 83 por 3.000 pesetas botella, asi que imaginad. Probamos de este maravilloso personaje cántabro:

Jean Leon Vinya La Scala

Jean Leon Vinya GiGi 2016

Y ya que estábamos allí no podíamos dejar de volver a probar este maravilloso Vardon Kennet

Var

y por supuesto nos fuimos a una de las bodegas de Toro que mas hacen que nuestras papilas saliven aquí os traemos:

Termes Blanco 2017 (espectacular este blanco)

Termes 2015

Numanthia 2014 (mantiene el nivel)

Termanthia 2013 (muy bueno, aunque ya la botella tenia muchas decantaciones, no se si realmente aguantará mucho mas, por su precio no debería estar así ojito)

Asta aquí por hoy, nos queda sólo una parte más que en breve la publicaremos. Un saludo a todxs.

 

Vino Tinto El Hombre Bala 2012: Garnacha Sutil

Una reunión de amigos y demás gente, estábamos de cata o simplemente a tragar y zampar, bueno, la verdad que unos pocos estábamos a catar y a aprender y otros a mover el abanico y hacer que todo el perfume que llevaba inundara la sala. Pero lo importante entre vinos y demás fue que aparecieron dos vinos que me gustaron mucho, entre ellos este Hombre Bala 2012.
Supongo que sabéis que a los Larpeiros nos gustan muchos los vinos elaborados por Jimenez Landi, y este no es una excepción, es elaborado por el equipo de Comando G formado por Fernando García de Bodegas Marañones, Marc Isart de Bodegas Bernabeleva y el propio Daniel Gómez Jiménez-Landi de Bodegas Jiménez-Landi, expertos en Garnachas de altura entre 900 y 1.000 metros de altitud y producción biodinámica, acogidos a la D.O. Vinos de Madrid.

Hombre Bala tiene un color cereza pálido, lágrima en copa que baja llorando lentamente, de nariz compleja, espectacular, pimienta, fruta, cuero, balsámico. En boca es seda, de ataque potente pero noble, llena la boca, para en retronasal empezar el circuito y volver a verle llorar, a ver como huele y como sabe, y otra vez, hasta que te has pispiado la botella de una sentada, y seguir pidiendo más vino. Espectacular, finura pues trabajan con fudres de 500 litros, y con la complejidad de conseguir la integración tan buena que tiene la acidez y los taninos.

Hombre Bala 2012, un vino que no os va a dejar indiferentes, alguno podrá decir que es raro, yo digo que este Comando G, sabe tratar la garnacha como pocos. Y que Jimenez Landi va a ser de lo mejor de España sin ninguna duda.

Vino Tinto Bajondillo 2012: Recordando a Daniel

Hace unos cuantos años que tuve el placer de conocer a Daniel Landi, un hombre joven, interesante, pero con las ideas claras de las cosas que quería hacer en Toledo bajo la D.O. Méntrida.
Hoy en día sigue luchando por hacer el vino que realmente le gusta y pelear en este mercado tan terrible.
Así que la otra noche, que fuimos de vinos, me encontré esta botella y no dudé en pedir que la abrieran para probarla, dado que no sabía que había sacado esta marca. Así que me dispuse a probar algo nuevo de él y a recordar la cerveza y las conversaciones que tuvimos hace años.
Fue allá por el 2004 cuando estos dos hermanos se meten en el proyecto de Jimenez Landi, y es ahora cuando Daniel se va en solitario a elaborar este vino con las uvas de garnacha y syrah de una edad entre los 12 y 40 años de edad, para luego envejecer durante 5 meses sobre sus lías en tinos de 500 l.  roble francés.
Posee un vivo color violeta, mucha y agradable fruta en nariz, el primer golpe de alcohol se va perdiendo con el paso del tiempo, para dejar que la acidez dulcifique y refresque este vino. Al principio se puede pensar que es bastante sencillo, pero tenemos la seguridad que va a evolucionar bastante en botella, que dentro de un tiempo se hará más serio y dará mucho que hablar. Nos gusta ese toque balsámico y algo salino. Vino que persiste en el paladar, en la copa, en el recuerdo.

Vino Tinto Bajondillo 2012, un vino que buscaré unas cuantas veces para seguir recordando a Daniel, a la espera de volver a tomar una cerveza y seguir charlando sobre vino y agricultura biodinámica.